Queremos compartir con todos ustedes la historia de Diana
Luego de varias denuncias de vecinos, nos acercamos hasta el domicilio en donde vivía Diana, nos encontramos con una perrita vieja, demasiado flaca y muy desmejorada. Intentamos hablar con su dueño en dos oportunidades. Al ver que no hubo cambio, la Asociación procedió a retirarla del domicilio y su dueño no puso resistencia alguna ya que obviamente quería deshacerse del pobre animal.
Luego de varias visitas al veterinario, analisis, ecografías y tratamientos decidimos que Diana no podía volver a su hogar ya que necesitaba de cuidados intensivos.
Una de las miembros de la Asociación acodicionó un lugar en su hogar para poder cuidar de Diana.
Sabemos que es una perrita vieja y que tal vez no nos acompañe por mucho tiempo más pero realmente queremos que viva sus ultimos meses o quizas años atendida, cuidada y con amor como nuestros amigos fieles se lo merecen.
Agradecemos a Regina y Michelle quienes día tras día cuidan de ella incondicionalmente y le brindan el cariño que nunca recibió de sus dueños.
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